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POLIURETANO PROYECTADO

El poliuretano es una resina termoplástica empleada en la fabricación de productos para sellantes y revestimientos.

Su aplicación fundamental es el aislamiento térmico, acústico e impermeabilizante. Su forma de actuar es la expansión de la espuma y su posterior rigidización.

PELIGROS PARA LA SALUD

Inhalación: la inhalación de polvos o vapores de isocianatos puede causar irritación respiratoria, dificultad para respirar, molestias en el pecho y reducción de la función pulmonar. La sobreexposición muy por encima de los niveles de exposición permisibles puede provocar bronquitis, espasmos bronquiales y edema pulmonar. La sobreexposición aguda o crónica a los isocianatos puede causar sensibilización en algunas personas, causando reacciones respiratorias alérgicas, incluyendo respiración sibilante, respiración entrecortada y dificultad para respirar.

Contacto con los ojos: produce irritación ocular tras contacto.

Contacto con la piel: el contacto con la piel puede causar irritación y puede ocasionar sensibilización de la piel. El contacto con la piel por sí solo puede producir la sensibilización respiratoria (asma).

Ingestión: la ingesta de una dosis considerable puede originar irritación de garganta, dolor abdominal, náuseas y vómitos.

Toxicidad para la reproducción: puede perjudicar a los niños alimentados con leche materna

 

PELIGROS FÍSICOS

No constan riesgos físicos para este producto.

  • Seguir la información que al respecto se indica en la etiqueta de los envases y en las fichas de datos de seguridad.
  • Mantener unas buenas condiciones de orden y limpieza.
  • Seguir, en su caso, los procedimientos de trabajo que se hayan establecido.
  • Evitar, en la medida de lo posible, el trasvase de productos químicos. Si ello no es posible, realizarlo a velocidades lentas, en una zona bien ventilada, disponiendo de control de derrames y limitando las operaciones manuales a las mínimas posibles. Procurar, en su caso, el empleo de sistemas de bombeo manuales o mecánicos.
  • No tocar los productos químicos con las manos, ni comer, fumar, beber, aplicar cosméticos, etc. durante su manipulación.
  • Mantener el producto lejos de alimentos, bebidas o tabaco.
  • Antes de cada pausa se deben lavar las manos. Al terminar el trabajo los trabajadores se deberán lavar o duchar y aplicarse crema hidratante inmediatamente después. Lavar la ropa manchada o humedecida previamente a su reutilización.
  • Conservar el etiquetaje de los recipientes y etiquetar debidamente las soluciones preparadas. Emplear envases adecuados al tipo de riesgo que presenta cada producto.
  • Mantener los recipientes cerrados herméticamente.
  • No reutilizar envases para otros productos sin eliminar la etiqueta original. No sobreponer etiquetas.
  • No utilizar el producto cerca de llamas o de otras posibles fuentes de ignición. No fumar.
  • Evitar la formación de concentraciones altas de vapor en el aire. Impedir la creación de nubes inflamables o explosivas. No respirar el polvo, humo o neblina.
  • Utilizar sólo en áreas ventiladas.
  • Evitar la generación de cargas electrostáticas. Los equipos e instalaciones eléctricas estarán protegidos frente al riesgo de incendio o explosión, según la reglamentación vigente. No se deben emplear herramientas que puedan producir chispas.
  • Envase a presión. No agujerear ni quemar, incluso después de usarlo.
  • Este producto no debe utilizarse en condiciones de ventilación insuficiente salvo si se emplea una mascarilla protectora con un filtro antigás adecuado
  • Abrir y manejar el recipiente con cuidado.
  • Usar los equipos de protección individual necesarios.

  • Establecer un lugar seguro en la obra para el almacenamiento de los productos químicos.
  • Agrupar los productos químicos por el tipo de riesgo que presentan, con el fin de evitar el almacenamiento conjunto de productos incompatibles.
  • Señalizar claramente y en lugar visible los riesgos.
  • Fijar y respetar cantidades máximas de productos químicos almacenados. Es conveniente reducir el stock al mínimo posible.
  • Conservar los productos en su envase de origen, bien cerrados y con dispositivo de seguridad.
  • Utilizar cubetos de retención o baldas inclinadas con recogida de fugas o derrames de producto químico. El suelo deberá ser impermeable para evitar su filtración y propagación.
  • Disponer de materiales de absorción adecuados (tierra, arena o similar, nunca serrín) para la recogida de posibles fugas  y derrames.
  • Los envases pesados, así como ácidos y bases, se deben colocar en los estantes más bajos.
  • Alejar los reactivos sensibles al agua de las tomas o conducciones de esta.
  • No almacenar envases de plástico al aire libre.
  • Garantizar unas condiciones adecuadas de orden y limpieza.
  • Mantener los recipientes herméticamente cerrados.
  • Observar las prescripciones vigentes para el almacenamiento de envases con gases comprimidos.
  • Incompatibilidades en almacenamiento conjunto: no almacenar junto con ácidos, agentes alcalinos (lejías) y agentes oxidantes.
  • No eliminar nunca el etiquetado de un producto.
  • Si se observa un producto sin etiquetar, se debe avisar al responsable del centro de trabajo.
  • Debido a la peligrosidad de este producto para el medio ambiente se recomienda manipularlo dentro de un área que disponga de barreras de control de la contaminación en caso de vertido, así como disponer de material absorbente en las proximidades de este.
  • Almacenar en un lugar fresco. Proteger del calor y la luz del sol.
  • Mantener lejos de agua.
  • El isocianato es muy reactivo y puede reaccionar si se mezcla de forma inapropiada con agua, ácidos, bases inorgánicas (como hidróxido de sodio), amoniaco, sales metálicas, agentes oxidantes (como la lejía o el cloro) o polioles.
  • Ver restricciones de almacenamiento en caso de aplicación del Reglamento APQ.

  • No verter en redes de alcantarillado, sistemas de drenaje o aguas superficiales (por ejemplo, arroyos).
  • Establecer un lugar adecuado para la gestión de los recipientes y residuos.
  • Desechar los recipientes o residuos en el lugar habilitado para ello.                                                  

En caso de accidente o malestar, acuda inmediatamente al médico. Los síntomas de intoxicación pueden aparecer hasta 48 horas después, se requiere supervisión médica después del accidente.

  • En caso de inhalación: desplazar a la persona afectada al aire libre y dejarla reposar en calma. Realizar respiración artificial si es necesario. Buscar atención médica inmediata.
  • En caso de contacto con la piel: lavar a fondo con agua y jabón la zona afectada de la piel. Si la irritación persiste, acudir al médico.
  • En caso de contacto con los ojos: en caso de contacto con los ojos, lavar inmediatamente y con abundante agua al menos durante 15 minutos. Buscar atención médica inmediata.
  • En caso de ingestión: no inducir al vómito, en el caso de que se produzca, mantener inclinada la cabeza hacia delante para evitar la aspiración. Mantener al afectado en reposo. Enjuagar la boca y la garganta, ya que existe la posibilidad de que hayan sido afectadas en la ingestión.

Nunca debe administrarse nada por la boca a una persona inconsciente.

Trabajadores que tras un reconocimiento médico presenten un APTO CONDICIONADO O NO APTO para el uso de estos productos.